Empezamos con un cuaderno y muchas dudas
Todo comenzó cuando Beatriu Ferrandis, nuestra fundadora, se dio cuenta de algo bastante obvio pero que nadie parecía decir en voz alta: la mayoría de herramientas financieras estaban diseñadas para empresas, no para personas normales intentando llegar a fin de mes.
En lugar de crear otra aplicación complicada, decidimos sentarnos con gente real. Tomamos café con profesores, mecánicos, estudiantes. Y descubrimos que todos tenían el mismo problema: sabían cuánto ganaban, pero no sabían realmente adónde iba su dinero.
Así nació nuestra metodología. No inventamos nada revolucionario. Simplemente organizamos lo que ya funciona y lo hicimos accesible para quienes no tienen un máster en economía.

